jueves, 26 de junio de 2014

El llamado de la ausencia

Cada vez nos alejamos más, solo por culpa de lo material. Espero que no se llegue al punto de que las personas ni si quiera se miren a los ojos.
Yo no hablo, porque sé que muchas veces las personas prefieren escuchar algo de las pantallas que sus propias voces, me obligan a que me calle porque no escuchan, cuando ni ellos mismo se atreven a escucharse ya que tienen miedo, tienen miedo de saber que no son los que creían que eran.

Creo que la humanidad llegó a caer tan pero tan bajo que a estas horas solo interesa el dinero o que es lo que posees, si te conocen muchas personas, cuánto éxito tienes y a muy pocas personas les interesa la inteligencia, más les importan tus calificaciones, nadie hoy en día se fija en la personalidad, se fijan en su cuerpo y cara. 

Las cosas cambian, pero van de mal en peor, me pregunto ¿cuándo será el día en que nadie escuche ni hable?